Yo salí un tiempo con un chico que se parecía a Collin Farrel.Miro la pantalla del televisor y me aproximo hasta ver los pixeles,sin duda es igual.No se cual es la trama de la pelicula que enganche de casualidad, estoy enfocada solo en las imagenes de este hombre y me parece perfecto, y tanto lo miro que ahora ya no puedo recordar bien el rostro de aquel con quien salí.
Pero mi frustacion se entibia con la evocacion de aquella noche en un departamento prestado donde los besos de aquel chico sabían profundos y humedos como la lluvia que golpeaba en la ventana; el colchon improvisado intimado por nosotros, las paredes de ese cuarto vacio y los gemidos que rebotaban entre el eco y nuestra agitacion.
Ayer y quizas de casualidad lo ví.Empujaba un coche que cargaba una niña mientras una linda chica a su lado festejaba con muecas la expresion inocente de baba y turron que venía del pequeño rodado.Yo que venía a paso rápido y que solo tuve tiempo para enfocar esa postal,alcanzé a pasar por detrás de fingiendo indiferencia , mientras él en reflejo de alarma alzó sus nariz que reconocía mi perfume, que como un fantasma, lo rozaba desde atrás.Desde la escalera mecanica mientras me elevaba lo ví disimular ante ellas su descubrimiento y mirar hacia los costados buscandome, pero me alejé del centro comercial ,hasta perderlo de vista.
Afuera un murmullo inquieto entre las nubes anaranjadas y el olor tibio que arroja la tarde presagia una tormenta.Cierro los ojos y todo vuelve a suceder. Mientras él desde su instinto masculino se pierde tras mi cabello mojado, entre los relampagos que lo empujaban hacia mis piernas,en aquella noche de despojos, en aquel departamento prestado.
L.
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