sábado, 1 de noviembre de 2008

Ya está


Un murmullo de recuerdos sobre mi pecho.
Con los dedos enredados entre el alma y el atardecer
evoco tu espejo;
me desvanezco en la postal irreal
y me acopio en la luz que se cuela por mis dedos
Te ahorro el mal momento,
para que empieces a buscar en lo certero.
Hay cientos de sueños que quieren incluirte.
Los vi anoche.
Cuando uno te tomó por el cuello
y te arrastró mar adentro
para entregarte a los otros
que sin piedad despedazaron
uno a uno mis sentimientos.

1 comentario:

dijo...

SUEÑOS IMPIADOSOS, Y VOS SLVANDO Y VOS ALLÍ, ÁNGEL PERFECTO.
BESOS